Amon: Demonio de la ira

Amon: Demonio de la ira.

"Verás, hay una guerra, bien y mal luchando por obtener el absoluto poder en la tierra, y tú querida mía, eres la única que tiene la solución a todo este lío."

—Amon.

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Nombre:	Príncipe Amon
Nacimiento:	El mismo día en que fue creado el infierno, fecha desconocida
Origen:	Creación de Satanás (su padre)
Estado:	Vivo, desterrado
Edad:	Aproximadamente 1 millón de años +
Alias:	—Príncipe infernal —Vástago Satánico —Marqués —Príncipe de la penumbra
Especie:	—Demonio legítimo —Ser/Criatura infernal —Humano (cuando posee cuerpos)
Genero:	Masculino
Altura: Color de cabello: Color de piel: Color de ojos:	—2,15 m aproximadamente —Blanco/Grisáceo —Gris clara —Amarillo intenso
Cargo infernal:	—Líder del quinto circulo infernal, príncipe del infierno
Pecado y naturaleza:	Ira
Allegados:	—Arcángel Gabriel —Arcángel Miguel —Asmodeo —Charlotte Cumberbatch
Símbolo:	Sello de Amon
Apariencia:	Originalmente Amon es similar a su padre en aspecto, no obstante, debido al odio que siente por él se vio forzado a cambiar su apariencia a voluntad luciendo leves rasgos de lobo con cola de serpiente, dientes de perro, o en ocasiones de sable, posee dos enormes alas, y dos cuernos un poco retorcidos
Habilidades:	—Control mental —Telequinesis —Poderes infernales (canalizar fuego proveniente del infierno en todo su ser) —Posesión demoníaca (en humanos, animales e incluso objetos) —Telepatía —Invisibilidad —Inmortalidad (esto no significa que sea invencible, sino que puede vivir milenios y milenios de años) —Transportación a voluntad y vuelo —Hablar todos los idiomas existentes, y la lengua demoníaca —Control de demonios (es capaz de controlar y manipular a todos los demonios en el infierno, incluso a aquellos más poderosos, como lo son los 7 príncipes infernales) —Manipulación del espacio-tiempo —Capacidad de cambiar de forma a voluntad —Puede crear vida a partir de él o de la nada —Ve el pasado, presente y futuro —Causa virtutis
Causa de destierro:	Intentar destronar a su propio padre (Satanás)

ORIGEN

Amon es el primogénito de Satanás. Fue la primera creación hecha por Satanás, se dice que la existencia de Amon provino a solo minutos después de haberse creado el infierno. El origen de Amon fue descrito detalladamente en su libro titulado "Las cartas de Amon" (libro que aun no se ha publicado) La existencia de Amon difiere por completo de la del resto de sus hermanos demonios, Satanás lo creó poco tiempo después de ser desterrado del cielo y de la creación del infierno. Satán, plagado de frustración, ira, deseo de venganza y sintiéndose el ser más solitario quiso crear algo para su compañía, algo que proviniera de él, debido a eso partió su corazón en dos y depositando todo su sentir creó a un indefenso y pequeño bebé demonio llamado Amon. La creación de Amon se debió a una prueba de poder de Satanás hacia Dios, quien trató de mostrarle que como él, él también podía crear vida.

Su padre lo creó a su imagen y semejanza, tal como Dios había hecho con Adán y con Eva. Satanás tomó una parte de él y la depositó en un vacío Amon, creándolo a base a base de su oscuridad, de tinieblas, a base de caos y discordia.

Por lo tanto, Amon fue la inspiración para la creación de los demás demonios, pero a diferencia del demonio de la ira, ellos fueron creados de la nada, con apariencia de demonios adultos, mientras Amon seguía siendo un bebé. A medida que él construía su reino Amon crecía a una velocidad parecida con la que lo hace un mortal, Satanás construyó un trono al lado del suyo, el trono que a Amon le pertenecía, convirtiéndose en el legítimo príncipe del inframundo y futuro heredero al trono.

Satanás a su manera le brindaba calidez y amor, pero él no había siquiera considerado el que Amon no era capaz de sentir absolutamente nada de afecto hacia él, ni hacia nadie. Cuando fue creciendo cambió su aspecto a voluntad, era tan parecido a él que no quería seguir siéndolo.

AÑOS MÁS TARDE

Comenzó a descubrir sus poderes, no tenía límites, era como Satanás, tan poderoso como él, de pequeño sus instintos salieron de golpe, torturaba a toda alma que se le atravesara en su camino, los demonios iban a la Tierra para corromper, y él aun no habiendo alcanzado su madurez también salía. Pervirtió, corrompió y llevó directo a la calamidad a infinidad de almas, en esas salidas al mundo mortal fue por primera vez que probó la carne humana, y fue donde descubrió que la piel y músculos humanos le causaban repugnancia, pero fue donde descubrió qué parte de la anatomía humana le encanta más, siendo esta, el corazón.

Satanás lo proclamó su primogénito líder del quinto circulo, convirtiéndose también en el líder de cuarenta legiones de demonios bajo su mando. Amon descubrió que podía crear vida, ninguno de los otros demonios de Satanás ha podido, solo él y el mismo Amon, creaba vida a partir de la nada, y a partir de él. Una de sus primeras creaciones fue una bestia extraña, a la que nombró Harpía, mitad mujer, mitad ave que se volvió su fiel compañera, y quién lo seguía a todas partes allá en el inframundo.

Le tomó solo trece años alcanzar su completa madurez. Se había vuelto uno de los demonios después de Satanás más imponentes de todo el infierno, incluso, sus hermanos le temían, ya que había sido capaz de matar a su propia raza por el solo hecho de desobedecerlo. Así mismo, descubrió otro de sus tantos poderes, este era diferente a todos los que conocía, era como un poder que nació de él, uno que nació directamente de lo que sentía, ira y deseo de poder, era tan letal teniendo ese poder, tan voraz e insaciable, salía de su interior y se reflejaba en su piel, piel a la cual por voluntad cambió, intentando no dejar rastro de como Satanás lo había hecho en un principio. Ese poder venía de su interior, parecía tener su propia consciencia, y su propio control, puesto que ni él mismo lo pudo controlar por más que trató, era como una voz en su cabeza que le hacía razonar. Teniendo esa fuerza de su lado todos comenzaron a temerle, excepto Asmodeo, con el que creó una relación basada en singular hermandad y carente razón.

Fue un guerrero al lado de su padre en incontables batallas contra Dios y sus ángeles, el llamado juicio final, guerra en la que tanto Satanás, Amon y los demonios eran derrotados.

Sus poderes son ilimitados, tal como los de su padre, solo él y Satanás poseen tal magnitud, ya que los poderes del resto de demonios tienen límites. Satanás trató por cientos y cientos de años lograr que Amon sintiera algo más que ira, pues él decía constantemente que eso lo hacía similar a un ángel. A partir de ese momentos y debido a la naturaleza iracunda y ambiciosa de Amon fue que empezó la rivalidad entre padre e hijo, tal rivalidad lo empujó a pretender destronar a su padre, y eso no hizo más que provocar su destierro, y el ser castigado a borrar su memoria cada vez que poseyera algún cuerpo humano.

Luego de cientos de años vagando como un demonio desterrado fue invocado por Charlotte aquella noche de juegos.

PERSONALIDAD

Se caracteriza por ser un demonio que representa a plenitud el pecado de la ira, desatando entre humanos el odio y crueles catástrofes. Puede controlar la mente de quién sea conduciéndolos a la perdición, a la negación de ellos mismos, provocándoles una ira y sed de venganza incontrolable.

Puede ver el pasado, el presente y el futuro. Un demonio de genio intenso, voluble, agresivo y manipulador. Puede fingir un rol tan perfectamente con tal de tomar lo que quiere. Posee una fuerza descomunal, así como el poder de hacer arder en llamas lo que quiera.